Diario Estelar Planeta Tierra

La naturaleza. La ciencia y sus bases filosóficas , porque las tiene, no lo duden, están entrando en un periodo delicado. Por ejemplo, el conocimiento de ciertos mecanismos que asociamos con la "realidad", sea lo que ésta sea, son convertidos en hechos "per se"; cuando, sólo son visiones momentáneas de lo que está más allá de nuestro cerebro/mente y que precisamente se genera en él. Siendo, como no puede ser de otro modo, cada cerebro distinto del resto, no podemos conocer, con exactitud, las imágenes y conceptos que en él se generan, ni de que modos se sirve para hacerlos conocidos a otros cerebros, Bien, podemos indicar que para eso tenemos el lenguaje, o los lenguajes, desde el simbólico hasta el matemático. Sin embargo, cualquiera de los lenguajes que usamos presenta estructuras limitadas y que sólo comprenden una parte de la humanidad. Se pueden transmitir e intentar hacerlas comprender, pero no siempre es posible. Diferencia, con el habla podemos comunicarnos y convertir, de modo más o menos sencillo, las frases en acciones específicas. El problema surge cuando usamos lenguajes pesudo-fisiológicos como el de las matemáticas o el de la mecánica cuántica. Sí, se producen en nuestro cerebro, pero así como es posible decir: tengo sed y queda claro que la solución es beber agua; cuando, indicamos que las dimensiones de la realidad física actual son más de 10; pues, como que nos vamos a ver la tele o a tomar una cerveza.

Toda la ideología de la igualdad se va por los suelos. La igualdad, como la justicia, son ideas,en si mismas, en el sentido de Platón o de lo que se describe en el Parménides. No pertencen al mundo exterior. Y si lo así lo fueran, no serían trascendentes: la naturaleza no es justa ni injusta, ni promueve la igualdad, ni nada en concreto que nosotros sepamos. Estos atributos corresponden a otra figura del mundo de las ideas: al absoluto, Dios.

Los ecologistas, que son muy saludables en nuestra sociedad, se mueven por puro egoísmo: la felicidad que les produce mantener el mundo en su estado actual. Esto está bien, parece ético y creo que lo es, pero no sé si lo es. Lo que si sé es que sigue muriendo mucha gente y que la genética no hace a todos los seres iguales, excepto en la química que los rige, y porque es muy complejo que cada ser vivo tuviera sistemas de supervivencia no compartidos con todos los seres humanos. Es, en este sentido, que nos unimos todos los seres vivos y compartimos destino en un momento dado, pero también sabemos que el mundo no perdurará como hoy lo vemos.

¿Podrá el ser humano emular a Dios? No se lo que haremos, pero por ahora está claro que no. Al menos si nos centramos en la Bondad y el Amor, de los cuales nadie habla, y no se si cree, de los que se tienen por más imposibles que la Justicia y la Igualdad.