Diario Estelar Planeta Tierra
El CLC ha decidido recomendar la lectura del siguiente libro: El crash del 2010 (Toda la verdad sobre la crisis) del autor Santiago Niño Becerra, publicado por "los libros del lince" en el año 2009. Se recomienda que lean las páginas 118 a 122 para que comprueben el interés de este libro. Si bien este libro se escribió uno o dos años antes del 2010 (el CLC desconoce este punto, depende del autor) predice algunos de los hechos actuales con una precisión notable.
Lo más interesante es que puede dar ideas para la salida de la crisis, si se lee con espíritu crítico y sin dogmatismos. La asociación será un factor importante, pero no la de las masas sino la de grupos que deseen sobrevivir en esta situación. Quizás este último punto sea un error de apreciación del CLC; pero no se observa un interés social por la acción de las masas, éstas han sido controladas con el placer de poseer, de modo efímero, objetos para el disfrute y el olvido del papel trascendente del ser humano; por ello los grupos con capacidades de escape de las normas de los, cada vez, más débiles estados podrán operar en un entorno de alta competitividad y quizás sobrevivir. Es decir, las personas debemos tomar las riendas de nuestro futuro y tratar de no depender de subvenciones cada vez más difíciles de obtener porque serán escasas y la solidaridad se ha estimulado desde los países ricos hacia los pobres, como un elemento de bondad aparente; cuando deberíamos haber dejado de explotarlos y fomentar su independencia y desarrollos propios, sin injerencias; pero queríamos sus riquezas. Al mismo tiempos que se las quitamos, les ayudábamos con la caridad, no de la religión, sino del materialismo. ¿Por qué una teórica ONG de científicos e ingenieros no se prestaba al desarrollo de la industria y servicios de esos países? ¿Por qué no ofrecía sus conocimientos gratis para facilitar el cambio a riesgo de su integridad física y del poder del mundo desarrollado?
No lo sé. ¿Tú lo sabes? Pues, entonces, hazlo saber.
Lo más interesante es que puede dar ideas para la salida de la crisis, si se lee con espíritu crítico y sin dogmatismos. La asociación será un factor importante, pero no la de las masas sino la de grupos que deseen sobrevivir en esta situación. Quizás este último punto sea un error de apreciación del CLC; pero no se observa un interés social por la acción de las masas, éstas han sido controladas con el placer de poseer, de modo efímero, objetos para el disfrute y el olvido del papel trascendente del ser humano; por ello los grupos con capacidades de escape de las normas de los, cada vez, más débiles estados podrán operar en un entorno de alta competitividad y quizás sobrevivir. Es decir, las personas debemos tomar las riendas de nuestro futuro y tratar de no depender de subvenciones cada vez más difíciles de obtener porque serán escasas y la solidaridad se ha estimulado desde los países ricos hacia los pobres, como un elemento de bondad aparente; cuando deberíamos haber dejado de explotarlos y fomentar su independencia y desarrollos propios, sin injerencias; pero queríamos sus riquezas. Al mismo tiempos que se las quitamos, les ayudábamos con la caridad, no de la religión, sino del materialismo. ¿Por qué una teórica ONG de científicos e ingenieros no se prestaba al desarrollo de la industria y servicios de esos países? ¿Por qué no ofrecía sus conocimientos gratis para facilitar el cambio a riesgo de su integridad física y del poder del mundo desarrollado?
No lo sé. ¿Tú lo sabes? Pues, entonces, hazlo saber.
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